Fecha: 21.04.16
Lugar: Habitación de Anne
Hora: 9:00 p.m.
Clima: Nublado

Y si no llegas, dormirás a la luz de la luna.. Canturreaba con una suave e hipnótica voz, mientras se desabrochaba la blusa quedando solo en jeans, se miró delante del espejo mientras sus alas se hacían visibles, aún se encontraban heridas y muy quemadas, pero comenzaba a ver cierta mejoría en ellas.

Aprovechando que sus compañeras no estaban, al parecer habían salido a "el antro" fuera lo que fuera que significara eso, decidió curarlas, con un poco de dificultad comenzó con la izquierda mientras con un trapo húmedo limpiaba la herida más grabe que se encontraba en el ala derecha.

Tenía unos días que había llegado, ya conocia a unas cuantas personas y unas cuantas de sus costumbres, había comenzado a recordar muy pocas cosas, demasiado pocas... eso le hacía sentir un poco triste, pero trataba en enfocarse en estar ahí y ayudar.

Suspiró enfocándose a su labor

Apenas tengo unos pocos días de llegar a la academia, todo se me había hecho bastante confuso, pero deduje que era porque vengo de una familia de alta sociedad y un lugar donde converjan tantos tipos de personas diferentes debería ser normal mi confusión. Aunque el lugar me es maravilloso (No se podía esperar menos de los gustos del Sr. Stark)

Hoy de pronto recibí noticias de que el Sr. Stark me mando llamar (por los dedos de midas) Me puse mi mejor traje y me arregle, no puedes ver a ese tipo de personas en fachas y fui directo para allá preguntándome porque me ha llamado. ¿Es por las apuestas sobre quien comía más rapido el primer día? ¿Por las sesiones de poker que abrí? ¿los planes para la cancha de golf que hice? Confieso que estaba muy asustado y a la vez emocionado. Quizás era para algo bueno.

Como sea, fui sólo para enterarme que querían que ayudará a una chica con sus poderes y lo que necesitaba, y tan pronto paso salí de ahí. ¡Infortunios! (Mi forma de decir mierda). ¿No sé supone que vine como estudiante? ¿Qué carajo ando haciendo yo enseñándole a otros? ¿No me pueden pagar por las molestias al menos? Todo esto quise preguntarle al Sr. Stark, pero ese señor es condena-mente rico y poderoso, en varias formas, lo respeto increíblemente así que para evitarme problemas me quede callado lo cual es bastante raro en mí.

En fin, voy a ver a la señorita Annelise Menocal (Como caballero que soy no se me debe olvidar el nombre de una dama) a sus aposentos. Me siento raro y nervioso en la zona de las chicas, así que espero que podamos acabar pronto con ello. Pero ando sumido en mis pensamientos y aun no me acostumbro al hecho que no estoy en mi casa o dominios donde voy como me plazca, así que cometo un error trascendental...no tocar.

-¿Señorita Menocal se encuen.....?- le dije mientras abría la puerta para encontrar una vista de lo más...extraña.

Por un lado la señorita está desnuda del torso hacia arriba lo cual me haria disculparme y abandonar inmediatamente la habitación...por otro veo alas. ALAS,...¡Por los dedos de midas! ¿Un Ángel? ¿Un demonio alado cómo yo? (No traigo las alas visibles en éste momento) ¿Qué es? Había escuchado que los ángeles reconocen demonios, no estoy muy seguro pero creo que soy algo como uno. ¿Significa que me reconocerá y me atacará? Se hizo un silencio de unos segundos hasta que recordé que está sin ropa.

-¡Lo siento!-

Con mi super-velocidad salí de la habitación y cerré la puerta...Pero mis problemas no terminan ahí. Debido al grito y la velocidad en la que salí muchas miradas furiosas de mujeres vienen en mi dirección lo que me haría sudar de nerviosismo si mi cuerpo fuera tan poco expresivo como resistente es. Aun así me apuré a decir algo a la señorita detrás de la puerta.

-Señorita Menocal, lamento mucho lo ocurrido, pero si no es mucho pedir. Podría apurarse y cambiarse para dejarme entrar...Me haría un enorme favor.-

Si no entro pronto me van a linchar aquí. Ya puedo ver los titulares de los periódicos diciendo "El caballero zorro muerto por "zorro" Oh, los enemigos de la familia se reirán de mí por décadas.

Por lo menos... murmuró mientras comenzaba a colocar una pomada que le habían dado las personas que le habían revisado al llegar ahí Ya no me duele tanto sonrió agradecida cuando la puerta de su cuarto se abrió, ella alzó la vista al espejo y miró un rostro masculino, su cabello era rojo, su vestimenta elegante y sus facciones mostraban desconcierto, en definitiva no era un rostro que hubiera visto antes, una sensación en su pecho le hizo estremeserse y sus alas desaparecieron cuando el chico grito y cerró la puerta.

Ella giró la cabeza mirando hacia la puerta, algo similar había sentido unos días atrás al conocer a Stephen, no supo que hacer cuando él chico habló.. era cierto, miró su pecho y recordó que "la desnudes no era bien vista", ella aún no comprendía el porque, ya que la desnudes era algo que a ella no le molestaba, tomó su blusa y se la colocó, sin abrocharla se "arropó" con ella mientras caminaba a la puerta.

Abrió lentamente el cerrojo y miró al exterior a las demas chicas, les sonrió con aire angelical No sucede nada, sólo fue un pequeño accidente, por favor continúen con sus actividades y les ofrezco una disculpa Su voz era suave y la reverencia que hizo le dio un toque de ternura y elegancia, con un gesto invitó a pasar al hombre a su alcoba. Cuando este lo hubo echo, ella cerró la puerta suavemente dándole la espalda Caballero, me temo que estoy en desventaja, usted sabe mi nombre pero yo desconozco el suyo...

Con una gracia digna de una princesa la señorita me salvo de tan precaria situación. Al menos no me matarán, pero mi reputación seguro se dañará. En fin, con la misma gracias y elegancia ella misma me pidió mi nombre. ¡Por los dedos de Midas! me siento como un campesino frente a una princesa, nunca me había sucedido algo así. Está señorita es algo sin duda. Recupero mi compostura.

-Ejem. Antes que nada vuelvo a disculparme por mi lamentable acción. No es algo propio en mí. No volverá a suceder se lo prometo. Sobre mi nombre, soy Maximillian Von Alexandros, me han pedido que la ayudará con cuestiones relevantes a sus poderes así como que la guié en lo que pudiera necesitar. -

-No me dieron mucha información y no me queda claro como la puedo ayudar, al fin de cuentas soy un nuevo estudiante en ésta academia también, pero por favor cuente conmigo para lo que gusté y mande cuando sea y donde sea.-

Me quedo sin palabras después de eso...realmente no sé muy bien cómo proseguir ahora. Todo esto es muy nuevo para mí. Pero entonces recuerdo que ella tenia Alas...Me pregunto si siente alguna sensación proveniente de mí o algo. En fin, es un inicio.

-Quizás esto sirva para empezar.- Digo mientras al instante salen de mi espalda por unos pequeños espacios entre mi ropa un par de alas una blanca y otra negra.

-Como quizás usted notará, no soy precisamente un ángel a pesar de tener alas, más tampoco soy en si un demonio...ni yo sé exactamente que soy mas sé que no enemigo suyo o de los humanos,se lo aseguro.-

- Ahora, si me pudiera hablar de usted quizás podría encontrar la forma de ayudarle-

Le miró inquieto y le sonrió tratando de calmarlo mientras ella se abrazaba el pecho para cubrirlo y no hacerle sentir incomodo, ella se sentó en la orilla de su cama, le escuchó ofrecerle una disculpa y negó suavemente con la cabeza cerrando los ojos en el gesto

No se preocupe por mi, quizas sea mal visto por las personas pero a mi no me molesta Agregó con voz suave, poniendo suma antención a su nombre, ante su silencio ella marcó mas su sonrisa y agregó: Maximillian Von AlexandrosRepitió pero no para memorizar su nombre, sino para llamar su atención agradesco su intención pero no recuerdo nada sobre mi pasado, y de mis poderes mucho menos

Pero cuando las alas del chico hicieron presencia los rasgos de Annelisse se hicieron agresivos y frios mientras se ponía de pie, con un pie atras en una postura de defenza lista para atacar, un instinto reflejo que ella no controló y que dejó libre su blusa que cubrió apenas sus pechos

Cuando ella fue conciente de su acto se quedó sorprendida mirando sus manos, sus piernas sus musculos tensos, no sabía porque había echo eso ¿Un demonio? ahora lo entendía, ese estremecimiento, era cuando un demonio estaba cerca

Annelise sintió sus piernas debiles mientras regresaba a una postura normal, se sentó olvidandose por completo de su semi desnudes, miraba el piso un poco confundida y con la cabeza dandole vueltas, voces e imagenes llegaban a su mente "...demonios" "hay que matarlos, eliminarlos"... "la tierra es un lugar lleno de tentaciones, no estas lista..."

La chica hundió su rostro entre sus manos

¡Por los dedos de midas! ¿Dice que no recuerda nada?¡Ésta chica es como yo!...bueno salgo que ella es por completo ángel.Esto si que no me lo esperaba. Ahora entiendo porque no se avergüenza, ahora entiendo porque me encomendaron ayudarla. Y por la fortuna de los Von Alexandros que lo voy a hacer.

La cuestión es que mi plan de enseñarle mis alas dio un giro erroneo. Al instante ella se tensó y se puso en guardía. La qué antes parecia una princesa ahora parece una gata acorralada que está apunto de saltar sobre el perro que la acorralo...Al parecer su subconsciente me considera su enemigo o algo así. Hasta repite la palabra demonio.

Grabo la imagen de la chica en mis pupilas con fuego. Sus expresiones, rasgos, todo. Hasta la más minina parte que me deja apreciar. Ella es lo mas cercano a mí que he visto, quiero conocerla a fondo.

Pronto se sienta en la cama como si la fuerza la abandonará. Seguramente mil ideas le corren ahora por la cabeza...y es mi deber calmarla.

Guardo mis alas y me voy a la esquina del cuarto. No voy a huir con el rabo entre las patas.Especialmente cuando el Sr. Stark me encomendó está tarea en persona. Entonces espero unos minutos hasta que se calme y cuando creo conveniente empiezo a hablar.

-15 de Julio de 1995, Londres, Inglaterra por la noche-

-Una señorita de 23 salia del edificio de una compañía tras haber efectuado un negocio. Iba a su auto acompañada de sus 2 guardias cuando vio a un hombre con elegantes ropas pasar por ahí mirando a sus alrededores con mucho interés. -

-Ella conocía a todos los ricos de la ciudad, supuso que era un rico nuevo o algo así, además que le pareció apuesto, por lo que decidió hablarle. Él chico se detuvo al verla y la miro en confusión, no contestó, ella le volvió a hablar y sucedió lo mismo, empezó a gritarle sintiéndose menospreciada pero él seguía sin responder.

Al final hizo que sus guardias lo arrestaran y lo encerraran desnudo en el sótano de su mansión hasta que llorara y suplicará por que lo liberaran. Ella no se atrevería a dañarlo físicamente...pero tampoco podía permitir que se burlaran de ella.

El chico paso 2 días en ese sótano sin agua, comida o ropa. Pero no se quejo miraba los alrededores como tratando de entenderlo. No comió, no bebió, no hizo del baño ni durmió pese a que había algo como una cama ahí y pese a todo no parecía afectado en lo absoluto. Ella entraba de a ratos a preguntarle si ya estaba listo para darse por vencido y suplicar, pero a pesar de todo lo que paso y del estar desnudo frente a ella él sólo la miraba con confusión sin sentir vergüenza o miedo.

Al 3th día ya se les hizo demasiado extraño el que se viera tan normal ante todo eso y ella se empezó a preocupar más por la salud del sujeto. Ella no era mala después de todo, sólo quería respeto. Le empezó a dar comida y agua, pero por 3 días él sólo lamió la comida y jugo con ella con las manos viendo su resistencia como bebe que está experimentando los objetos, pero no comió o bebió realmente.

Al 7th día llamo un Doctor para que lo revisara. El doctor no se podía creer lo que le decían del sujeto, era imposible, pero se dio cuenta que era cierto. Hizo muchos experimentos por semanas y al final concluyo que el chico no hablaba porque simplemente no sabía hablar, no se cubría sus partes porque no sabía que tenia qué. Tenia amnesia grave, a su grado máximo. Lo único que el chico sabía hacer era caminar y si no comía o dormía era porque simplemente no era humano...- Tras eso pare un segundo y miré a Annelise antes de continuar.

-Durante las pruebas noto que el chico constantemente miraba su espalda, cómo si sintiera que faltara algo y casi le da un infarto cuando el chico "encontró" lo que buscaba ;un par de alas, una blanca y una negra que salieron de su espalda-

Tras eso hice una pequeña pausa. No creí necesitar explicar quien era el chico.

- Creo que es por eso que me asignaron el ayudarte y planeo hacerlo si me dejas. Como ya dije al principio, no soy tu enemigo o de la humanidad. Por eso te pido que luches contra lo que sea que desperté en ti y me dejes demostrarte quien soy, en cambio prometo, si en una semana aun sientes algún deseo hostil contra mí entonces- Me quito el cinto con las espadas y dejo caer mis espadas frente a ella.- Permitiré que hagas conmigo lo que quieras-

Movió la cabeza de un lado a otro como tratando de sacar las ideas que se aglomeraban en su mente, suspiró mientras le miraba caminar a una de las esquinas, el hombre comenzó a hablar y ella le escuchó mientras en su mente corrían las imágenes como si se corriera una película en su cabeza, cuando le miró ella le sonrió con suma ternura, le dejó terminar su dialogo y le miró dejar caer sus armas

Si eso era verdad, si todo lo que él había dicho sobre que no quería lastimarla y sólo buscaba ayudarla... que la humanidad no era su enemiga... entonces ella no quería lastimarlo, se levantó de su lugar y se acercó a las espadas, las tomó por la empuñadura, las blandió con dificultad antes de tomarlas de forma que él pudiera tomarla.

Por lo menos le dijo con suma dulsura para que supiera que no queria lastimarlo yo se un poco más que tú entregando el arma ella recorrió el rostro de él, sus gestos, sus rasgos, dió un paso hacia delante enfocando toda su atención, con un poco de duda alzó su mano y la acercó lentamente al rostro de Maximilliam, primero acarició su mejilla con el dorso de sus manos, despues con la punta de sus dedos recorrió sus labios y por ultimo alejó su mano mirandole con cierta emoci´n y duda

Eres como yo... mas o menos murmuró

Parece que mis palabras funcionaron y ella se ha calmado. Con gran dulzura me extendió mis armas a lo que con una sonrisa las tomo y me las guardo..pero la cosa no quedo así.

Mi corazón (Si mi especie tiene uno) debió de parar sus latidos, el mundo se volvio silencioso, No. en realidad el mundo desapareció y solo quedo ella cuando con su pequeña mano alcanzó mi rostro, esa suave caricia detuvo todo fuera de mí para enfocarse en encender todo lo que puede moverse dentro y ponerlo en sobre marcha al punto que de inmediato siento un calor haría morir de envidia a las llamas del infierno.

Allí está ella, a prácticamente nada de distancia, con su blusa abierta a penas tapando sus pechos, mientras su mano descansa en mi mejilla unos segundos antes de ir a mis labios. Ninguno hombre puede resistirse a eso. ¿Por qué diantres lo haría un demonio?

Acorto mi distancia un poco más, mis manos la toman suavemente de sus caderas y con la misma suavidad la intentan acercar a mí. Estos brazos, capaces de partir las espaldas de los osos con suma facilidad, ahora están alrededor de ella tocándola cómo si estuviera hecha del más fino cristal y aun así manteniendo un agarré fuerte queriendo hacerle saber mi fuerza y deseo por ella.

Mis ojos ven a través de sus ojos intentando llegar hasta su alma donde puedo ver a algo que una vez fui, lentamente mi mano pasa a su largo cabello, cual parecen hilos de seda entre mis dedos y su olor incluso desde aquí empieza a intoxicarme aumentando más mi trance, pronto no es suficiente y mis ojos dejan los suyos para enfocarse en sus pequeños y dulces labios como si los quisiera quemar en mi memoria, mi mano con suavidad toca su barbilla con el indice mientras el pulgar se dedica a recorrer su labio inferior hasta que lo abre ligeramente permitiendo ver la punta de su lengua... Eso es todo lo que faltaba. Mi deseo por ella amenacé con hacerme volar en mil pedazos si no la tomo ahora mismo.

Mi cabeza se acerca a la suya lentamente y no parece tener intención de detenerse.

No necesito hacer mucho, con un suave movimiento podría abrir su camisa y lanzar mis labios a los suyos para devorarlos hasta que me canse de ellos y decida pasar a sus pechos. Igual y estará sorprendida, pero con la inocencia que tiene no debería serme difícil llevarlo hasta el final y luego de nuevo al final una y otra vez hasta que al fin consuma todo éste deseo que tengo reprimido...si tan sólo no tuviera un poco de conciencia.



Hoy es uno de eso días en los que me odio a mi mismo en definitiva.

Cierro los ojos maldiciéndome mentalmente e imaginándome gritando a los cielos pidiendo que consuman mi cuerpo con rayos y truenos. Cualquier cosa que me ayude a aliviar éste odio a mi mismo...Pero a pesar de todo mi odio hacia mí y todos los reclamos de mi consciencia mis labios la tocan.

Al final mis labios suavemente besan su frente y por los instantes que dura el contacto no parece que haya fuerza en el universo que los separé de su piel, cómo si quisieran descargar en tan tierno contacto todo el sentimiento reprimido que tengo ahora mismo a pesar de no saber que no es ni remotamente posible tal acción.

Entonces me separó de su piel y la alejo suavemente de mi. Aunque en mi interior siento cómo si quisiera alejarme de un agujero negro que me trata de succionar con su increíble gravedad. ¡Por los dedos de midas! Desde que tengo mi super-fuerza nunca he sentido tal dificultad para mover algo cómo lo siento ahora mismo que intento alejarme de su cuerpo.

Cielo mis ojos y me dispongo a hablar.

- Desde ahora yo voy a ser uno de tus maestros. Intentaré enseñarte todo respecto a éste mundo y ayudarte a desarrollar tus poderes. Así que te daré una serie de reglas y tareas que debes procurar seguir al pie de la letra para que no haya problemas. ¿Entendido?-

Espero que me diga que está de acuerdo antes de continuar.

-Regla numero uno. No hacer movimientos que puedan ser considerados muy íntimos con gente del sexo opuesto. Entre las cosas que entran en esa categoría están eso de tocarle el rostro y labios con las manos y poner tus labios sobre los del otro o su piel.Tampoco dejes que nadie toque tus pechos, tu trasero o el espacio entre tus piernas. Sí alguien te los toca golpealo muy fuerte.-

-Debes aprender acerca de relaciones sociales y las consecuencias de realizar ese tipo de contactos antes de que puedas decidir si realmente está bien tocar o dejarse tocar por esa persona de esa manera.-

-Desobedecer esa regla puede darles ideas equivocadas a la otra persona acerca de la relación entre ustedes o lo incite a hacer algo que no debe -

Voy hacia su ventana y la abro. Las habitaciones de los maestros y estudiantes están en el tercer piso, así que no hay problema de que alguien pueda ver adentro.

- Te espero en el patio para que empecemos a verlo de tus poderes. Arréglate y ven tan pronto como puedas. Si puedes ponte algo que te permita sacar tus alas sin revelar tus pechos o romper la ropa en el proceso-Le digo aparentando estar más tranquilo aunque en realidad sólo estoy inventando una escusa para salir de aquí y mojarme la cabeza con agua fría.

Espero por si desea decirme algo, si no me detiene saldré por la ventana para esperarla en el patio como le dije.

Le miró acercarse y sonrió, se sentía realmente alegre de encontrar alguien que comprendiera su situación, las manos del hombre se posaron sobre las caderas de ella, un gesto que ella no vio mal, al contrario, ella deseaba conocerlo, incluso concer a los demás seres con los que ella se encontrara, aprender sus rasgos, sus facciones, sintió la fuerza de él y cerró los ojos, era una sensación muy agradable, no se sentía ya insegura.

Abrió los ojos y se encontró con los de él, se perdió un segundo en su profundidad, pero la mano de él la distrajo, él le dio animos para que ella enredada uno de sus dedos en el cabello rojo de él, su color era demasiado llamativo, le gustaba mucho, miró su propio cabello pensando que le gustaría que fuera del mismo color que el de él.

Pronto sintió los dedos de Maximillian recorrer sus labios y ella cerró los ojos ante la placentera sensación de que otro ser la tocara, siente que se acerca y abre los ojos mirándole con cierta duda ante sus movimientos, pero se detiene y parece que Cabilia, la mirada de Annelise le interroga al encontrar los ojos de él

Su preocupación se hace mayor cuando él cierra los ojos con frustración, ella apoya su frente contra su cabeza y son los labios de maximillia quien le recibe, ella suspira tranquila colocándose de puntillas. Pero… él… se aleja, Annelise se preunta si ha hecho algo malo, algo como para molestarlo… Sí, seguro ella hizo algo para molestarlo debido a que cuando comenzó a hablar él se escuchaba molesto, miró hacia abajo descubriendo de nuevo su pecho desnudo, sí, seguro era por eso, ella se cubrió sintiendo pena por primera vez, pena por haberlo echo enojar, asintió a todo lo que él decía sin decir ni una palabra

¿Tocarle el rostro? Ella le había tocado el rostro… entonces eso era malo? Le miró preocupada con aquella duda, cuando mensiono sus pechos ella los apretó contra de si como si quiera ocultar la existencia de aquel par de vultos, miró hacia el piso apenada, mientras asentía con la cabeza, evitando verle

..¿Estas molesto? ¿Hice mal al tocarte? la emoción que había llegado a sentir se desaparecia

Le mira alejarse, ir a la ventana, sus compañeros les habían dicho que no era bueno salir por las ventanas, y menos después de las 9, miró el reloj digital, era cerca de las 9:30… se mordió el labio inferior con miedo, él había dicho que tenía que seguir sus reglas, de obedecerlo… pero… ella estaba curando sus heridas para poder descansar

Yo… pero… murmuró dudando si era bueno hacerlo enojarse más con ella, miró al piso, e hizo aparecer sus alas heridas yo aún no puedo volar… estoy curando, son lo único que no quiere curar su voz se hizo quedita, con duda y preocupación, aferrando cada vez mas su pecho, hasta el punto de provocarse a si misma dolor

La pregunta de la joven me lastima, me siento incluso más mal conmigo mismo por estar apunto de haber hecho tal cosa. Pero tengo que ser fuerte y explicarle bien.

- Estoy molesto...pero conmigo mismo porque acabo de prometer protegerte y casi hago algo que pudo afectar tu futuro. Tú todavía no entiendes lo suficiente de relaciones sociales así que de haber continuado hubiera sido como si me aprovechará de ti y causado o dolor en el futuro, o que después sea más difícil que entiendas el valor real de ese tipo de acciones- Me detengo un segundo para pensar como explicarlo.

-Verás, las relaciones sociales son difíciles de explicar. Lo que hiciste no es malo realmente. Si soy honesto me gusto y quizás me encantaría repetirlo cuando entiendas mejor el significado de ese tipo de esas acciones. Pero son cosas que no se deben hacer tan a la ligera, se deben de hacer con una persona realmente importante para ti y aun eres muy nueva en éste mundo para decidir quien ocupará ese lugar. -

Luego me habla de la hora y de sus alas cuando intento retirarme. Así que me obligo a quedarme e inclinarme para que no vea a mi "tercera" espada lista para el "combate". Pronto se calmará.

- No te preocupes. Estoy muy consiente que no puedes volar, no planeo intentar que lo hagas, pero quiero que intentes tenerlas afuera el mayor tiempo posible y ejercitarte un poco con ellas, quizás así se regeneren más rápido. Además igual nos conviene probar un par de cosas con ellas. Capaz que eres capaz de proyectar una luz sanadora con que curarlas de inmediato y no lo sabes.- Le digo con una sonrisa mientras me cruzo de hombros.

Luego miro el reloj. Yo no necesito dormir, aunque me siento ligeramente más fuerte temporalmente por hacerlo o al comer. Supuse que ella seria similar, pero puede que me haya equivocado.

-No planeo quitarte mucho tiempo. Sé que es tarde, así que sólo quiero echarle una mirada rápido a tus capacidades e intentar una que otra cosa. No debería tomar más de 30 minutos. Aunque sí realmente deseas dejarlo para mañana lo entenderé. -

Annelise permaneció inmóvil un segundo, aún aferrándose a sus pechos como si quisiera que no estuvieran ahí, aún culpandolos de la molestia de Maximillian, cuando él dice que esta molesto consigo mismo ella le mira con duda ¿alguien se podía enojar consigo misma?

Escucha lo de "una persona importante" se acerca un poco y le mira con una inocente sonrisa
Yo sé que tú serás una persona importante para mi su voz se escuchaba llena de seguridad, y su sonrisa era honesta, ella sentía una conexión especial con él.

Escuchó su explicación y asintió, sí el lo decía... suspiró como si aquello le causara dolor, ver sus alas le hacia sentir triste, asintió mientras se dirigía a buscar alguna blusa, algo que le dejara su espalda libre para poder sacar sus alas

Tengo que bajar por las escaleras, tardare un poco le explicó mientras tomaba una blusa que se abrochaba solo por el cuello y por la cintura, se quitó la blusa sin siquiera ver si él aun estaba ahí mientras se colocaba la nueva prenda

Debo decir que la inocencia de ésta niña me resulta…Sensual. ¡Por el toque de midas! ¿Cómo puede algo tan puro incitar tanto mi “lado obscuro”? Si el fruto prohibido que comieron Adán y Eva era así no me extraña que se volvieran pecadores.

La confianza de ésta inocente jovencita me derrite el corazón. Casi siento que hubiera estado bien dejar que mis deseos me llevasen. Pero al mismo tiempo creo que me sentiría cómo la peor escoria humana por haberlo hecho. ¿Cómo puede pasar eso?

Por el toque de midas. ¿Qué me está haciendo ésta chica?

Ella suspira con un aire de dolor ante la idea de descubrir sus alas. Entiendo su dolor, no ha de ser agradable la imagen de sus alas dañadas. Pero es por su bien. Ella se da la vuelta y empieza a ¡Cambiarse! Mis ojos se abren de par en par mientras miro atónito…y con cierto deseo a ésta niña. Quiero salir de ahí, pero al mismo tiempo no quiero. Quiero seguir mirándola. Esto me hace darme la vuelta hacia la ventana muy lentamente.

Cuando por fin agarro voluntad para salir por la ventana me detengo y tratando de componer mi voz le digo sin voltear.

-…Sé que no te ha de gustar sacar tus alas tal como están. Pero lo que quiero es que sanen lo más pronto posible…Quiero verte volar por los cielos a mí lado con una sonrisa- El rojo de mi rostro ahora ha de hacer parecer el de mi cabello una broma ahora mismo, pero aun así continuo-…Así que si me haces el favor de tratar de tener tus alas fueras tanto tiempo como puedas mientras estés sola o sólo conmigo cerca, prometo que en compensación te llevaré a mi ciudad éste fin de semana para mostrártela y enseñarte tanto cómo se pueda en esos días.-

Sin esperar su respuesta salto por la ventana para caer al patio donde espero lograr relajarme un poco mientras llega Annelise.

Con dificultad la chica abrochó la camisa como le habían indicado unos días atrás, pero cuando escuchó los deseos de Maximillian volteó a verlo con una sonrisa inocente y alegre, sí, ella también deseaba volar a su lado, le miró saltar mientras amarraba la parte de abajo, caminó lentamente a la ventana mirando hacía abajo, su pecho se agitó un poco al ver la altura, un flash back le llevó a cuando ella llegó, de como cayó al agua, la sensación de su pecho llenandose de agua, el frío, cerró los ojos y negó la cabeza para sacarse esa idea

se separó un poco de la ventana mientras miraba de reojo su reflejo en el espejo, al siguiente momento sus alas se extendían, le era doloroso, sus alas eran blancas con toques rosas, o así aparentaban las pocas que no estaban quemadas, sus gestos son tristes, pero voltea de nuevo a la ventana, mira a Maximillian y sonrie...

Annelise mira la puerta pensando que tardara mucho en bajar hasta haya, mira de nuevo el piso, preguntandose si ella podría hacer lo mismo que maximillian Maximillian Von Alexandros le llamó mientras ella se tomaba de los marcos de la ventana dando una visión un tanto fantastica, la luz del cuarto no permitia que se viera mas que la silueta de una delgada mujer con alas, a la distancia y en esa pose, ni sus heridas se notaban, sin más se arrojó sus alas por un segundo le hicieron planear hasta que un dolor intenso le hizo caer sin control

look:

Había llegado al suelo sin problemas gracias a mi resistencia y me moje la cabeza. Eso me relaja bastante...aunque no lo suficiente por lo que veo en cierta zona.

De pronto oigo mi nombre entero, algo bastante inusual, y volteo a ver a la fuente. Es la habitación de la señorita Annelise, hay una figura alada (supongo que ella)

"¿Qué hace en la ventana"

De pronto al saltar mis ojos se abren como platos. Por un segundo creo que está planeando...pero al siguiente cae. Mi sangre se congela mientras veo esto y antes de siquiera pensarlo estoy corriendo a una velocidad sin precedentes y con mis alas extendidas. Gracias a esto llego a tiempo y alcanzo a saltar para cacharla en el aire, su peso me hace bajar pero mis alas logran dispersar la fuerza de la caída hasta quedar a un centímetro del suelo volando.

Con la dama en mis brazos la miro a los ojos.

- ¿Estás bien?- Le pregunto preocupado.

Espero su respuesta y luego digo.

- No te desanimes por esto. Se curaran y aprenderás a volar. Estuviste planeando un segundo al menos. Yo, aunque tenía mis alas bien, no recordaba como volar hace 20 años y me fui directo al suelo tantas veces por intentar empezar desde lugares altos que el doctor me hizo una membrecía de cliente frecuente en su clínica antes de siquiera conseguir ese segundo de planeación-

Cerró los ojos con intensidad, segura de que iba a sentir el mismo dolor de antes, segura de que sus pulmones se llenarían de nuevo de líquido, pero no fue así, terminó en los brazos de Max, sintió por un segundo que lo haría caer, pero él logró mantenerse en el aire, su corazón latía de forma acelerada aunque su rostro se encontraba sin emociones, no sabía que era lo que crecpia en su pecho, era una fea sensación, tristesa y algo más... ella era un ángel, debería poder volar... quizas sus alas estaban así porque ella no debía hacerlo... ¿un castigo?

Escuchó a Max como si fuera una voz distante y ella asintió con la cabeza, le miró, sí, estaba bien y gracias a él, le sonrió y le besó en la mejilla, al cabo, los besos de gratitud si los conocía y deseaba darle uno Gracias a ti le escuchó ¿desanimarse? era así como se llamaba a lo que sentía, ladeó su rostro terminado apoyandolo sobre el pecho de él, le miró de forma pensativa, una tristesa comenzaba a corromperle el alma, con sus alas destruidas... y él sano, había tardado

Pero... por lo menos había planeado algo, una sonrisa forzada se dibujó en sus labios, bueno, por lo menos podría seguir intentandolo

¿Será duro verdad? le preguntó suavemente, pensando en el dolor, dudó un segundo, pero se enderezó mirandolo a los ojos, era agradable estar en el aire con él, miró al suelo y después a él nuevamente con una enorme sonrisa Pero, aunque sea duro... al final ... ¿Volaré a tu lado cierto?

Me han explotado granadas a pocos metros y apenas mis ropas han rasgado. Me han disparado, pero las balas a penas y me han molestado. He caído desde un 5th piso y me he levantado como si nada. Pero un simple beso en la mejilla, algo que he hecho miles de veces como saludo hace que mi fuerza se me vaya de mi cuerpo dejándome como un simple humano, mi corazón enternece y mi cuerpo estremece.

Ella sigue algo desanimada y me hace sus inocentes y lindas preguntas que me hacen sonreir y al mismo tiempo me entristecen por permitirme sentir su tristeza. Entonces por un segundo sonrio ampliamente.

- Puede que sea algo duro. Pero definitivamente volaremos juntos- Le digo con un rostro lleno de confianza en mis palabras.

- Además, tú la tienes más fácil que yo. Cómo dije antes, tú lograste planear un segundo, a mi me tomo mucho tiempo lograr eso. Debe ser porque tu memoria no está tan dañada como la mia, por eso que no necesitáramos enseñarte a hablar. Ese segundo significa que algo recuerdas del vuelo, probablemente lo dominas pero tus alas están lastimadas por lo que no debe tomar tanto tiempo-

-Aparte, aun si necesitas volver a aprender a volar tu tienes a alguien con un par de alas que te enseñe. Yo no tenia a quien recurrir. Así que aprenderás incluso más rápido. No te desanimes. Sólo es cosa de esperar a que curen básicamente y para eso debemos entrenar. ¿De acuerdo?-

off: ya puedes ver la enorme sonrisa de anne en la firma ;)

on:
Anne se encontraba ajena a lo que sus acciones provocaban en el chico, su inocencia no le permitía ver que su cuerpo femenino podía ser un arma contra su nuevo compañero, ni lo fácil que le estaba resultando inquietarlo, ella sólo era consciente en ese momento que la confianza de él le estaba alegrando su corazón y su confianza sólo la contagiaba más, sintió seguridad de estar acompañada de él, ver la sonrisa de su nuevo compañero era algo que le resultaba maravilloso, ¡era tan hermoso con aquella sonrisa!

Su tristeza se iba evaporando y sólo era por él.

¿habrá más entrenamiento? Preguntó mirando a su al rededor, por alguna razón la oscuridad y estar afuera le inquietaba, aunque aquella noche su pregunta sólo iba por costumbre ¿o esto será todo por hoy? su atención se distrajo de repente con algo tan sencillo que no sabía porque antes no lo había echo, era sólo una niña descubriendo el mundo, con una atención que divagaba con demasiada fácilidad ... tus alas... no son iguales le dijo como si él nunca su hubiera dado cuenta de ello, con los ojos muy abiertos y los labios separados

Parecía que estaba logrando desparecer la tristeza de Annelise y está volviendo a ser su antiguo yo. Comenzó a preguntar acerca del entrenamiento y mis alas.

- Todavía ni ha empezado el entrenamiento. Y sí, no son iguales, no sé porqué, aunque me gusta el cambio de colores. Espero algún día recordar algo de mi pasado, pero salvo por el nombre de Malakiel, no sé nada de él.Creo que ese era mi nombre en el pasado, pero es lo único que recuerdo-

La bajo al suelo con suavidad con cierto dolor por hacerlo.

- Bien, hemos de empezar. Para empezar estira uno de tus brazos por favor y dime que sientes-

Cuando lo haga empezaré a recorrerlo entero con mis dedos, presionando muy suavemente su carne, no queriendo lastimarla. Sólo queriendo ver cómo se comporta a la presión. Luego empezaré a recorrer mi dedo a lo largo de su brazo hasta llegar a su palma y de ahí yendo hasta la punta de sus dedos. Intento descubrir si tiene super resistencia como yo y sus reacciones. Algunos mutantes muestran sus poderes ante ciertas sentimientos.

-¿Melakiel?... ¿Malakiel? murmuró mientras ponía sus pies en el suelo, un poco decepcionada de tener que regresar a la tierra, caviló un poco mientras caminaba al rededor de él para apreciar mejor sus alas, cuando estuvo frente de él le sonrió Para mi son hermosas

Asintió ante la orden que le dio sin entender porque, estiró su brazo mirando con atención el recorrer de las manos de él, ante el primer toque sus alas se extendieron como si fuera a volar, aunque no fuera la primera vez que la tocaran, para Annelise aún era una sensación extraña, pero no desagradable, sostuvo la respiración, la presión era suave pero aun así dejaba un sutil camino rojo que aunque desaparecía al momento delataba un cuerpo delicado

Maximillian Von Alexandros... le llamó un poco confundida Si esta permitido que alguien, aparte de ti ¿me toque de esta manera?

- Es Malakiel y si te gusta puedes decirme así en vez de Maximillian.- Dije aclarando cuando ella empezó a tratar de repetir el nombre. - Gracias. Me alegra que te gusten Le digo con una sonrisa.

Luego mientras la estudio me hace una pregunta que me hace dándome que estoy haciendo y mi cara se pone algo roja. Así que la suelto.

- Emmm. Ahora que lo mencionas. Sí a lo de precionar ciertos puntos siempre que sea un Doctor capacitado de la escuela, por una prueba formal. No a lo recorrer la piel de tu brazó. Lo hice para probar las reacciones de tu cuerpo, pero el doctor seguramente no lo necesitará-

-...En fin. No tienes super-resistencia como yo y tu piel actúa de manera normal, así que ten cuidado de no lastimarte.Aunque tus alas muestran un interesante reflejo a cierto contacto. Pero no ha pasado nada fuera de lo común-

Entonces la suelto y doy un gran salto hacia atrás alejándome 10 metros.

- Ahora trata de visualizar frente a mí por un minuto. Concéntrate en visualizarte y desear estar frente a mí. Para ver si puedes tele-transportarte. Sino puedes tras un minuto corre desde allá hasta acá y manda tu mejor golpe a mi mano. Veamos tu fuerza y velocidad. Luego de esto veremos si tienes alguna afinidad elemental y terminamos por hoy.-

Malakiel murmuró quedamente antes de negar con suavidad la cabeza Maximillian Von Alexandros repitió, por alguna razón le gustaba decir completamente su nombre, estaba segura que nadie lo hacía y quería que él le recordara aunque fuera por una excentricidad

Le miró ponerse rojo y ella rió suavemente, sin darse cuenta que esa era la primera risa que soltaba y era sólo para él, aunque no le agradó que la soltara.

Escuchó atenta a su explicación, miró su brazo recorriendo con la mirada los puntos que él había recorrido, parpadeó un poco y le miró nuevamente

Pero me gustó como se sintió que me tocaras siguió escuchandole, no supo si eso de tener super resistencia era bueno o malo, ante lo de sus alas volteó a verlas, trató de estirarlas y estas apenas y se movieron, le causó un poco de dolor y le miró nuevamente Mis alas no mienten ... les gustó tenerte cerca le sonrió

Le miró saltar y ella parpadeó

¿Podré saltar asi? Le preguntó antes de seguir sus instrucciones, concentró toda su atención en donde estaba, entrecerró los ojos, concentró su atención hasta que su cabeza dolió, pero nada pasó, le miró desilucionada

No puedo teletransportarme le informó en voz de alta, disponiéndose a correr, primero lento, despues en menos de un segundo se encontraba junto a él lanzando un golpe, pero antes incluso de tocarlo se detuvo, le miró como si algo le doliera No te golpearé, no quiero

El semblante en mi rostro debió expresar la duda que me acongoja. ¿Será que piensa que debe decirme por el nombre entero o sólo deseó hacerlo?...bueno ya se dará cuenta eventualmente del error si es el primer caso. Por otro lado, parece está niña disfruta de hacerme ruborizar al comentar que le gusto mi toque y que a sus alas les gusta tenerme cerca.

Al verme saltar ella preguntó si podía hacer lo mismo.

- Tal vez, tal vez. Veremos-

AL final, le fue imposible tele-transportarse y se dirigió a pie hacia mí. Al principio fue normal, pero pronto estaba frente a mí. Ésta chica tenía súper-velocidad, con la mía me preparé para recibir un fuerte golpe en mi mano...pero nunca llego. Ella no quiso golpearme por lo que se detuvo antes dé dejándome con una gota cayendo por mi sien.

-Tengo súper-resistencia, aun si tuvieras súper-fuerza no debería pasarme nada, pero está bien, lo entiendo, así eres tú. Por cierto, parece que tienes súper-velocidad como yo. Puedes moverte mucho más rápido que la mayoría. Te será de mucha utilidad. Al menos ya encontramos una de tus habilidades y es una de las que tengo yo.- Le dije con una sonrisa con un poco de orgullo.

–Ya que no me quieres golpear intenta saltar tan alto como puedas, si saltas más de tres metros es que tienes una fuerza sobre humana. Luego de eso necesitamos recursos para la siguiente práctica. Así que iremos a toda velocidad por una botella de agua, cerillos y luego por unas ramitas, quiero que me intentes seguir el paso-

Tras eso fui empecé a correr primero lento para que me viera y luego a toda velocidad. En segundos llegue a la cocina, tome la botella y los cerillos, hasta que regresé pero no en vez de detenerme fui por unas ramas me pare en un lugar seguro para hacer una fogata, prendí una pequeña fogata y destape la botella cual deje a un lado de la fogata pero suficientemente lejos para que no le dé el calor a la botella.

Me siento cerca de la fogata con las piernas cruzadas y pongo mis manos separadas pero con los dedos apuntándose el uno al otro. Si ella me siguió hasta aquí le diré.

–Esto será lo último del día de hoy. Quiero que te sientes así y trates de sentir el mundo. Tomate un minuto para intentar sentir a tu alrededor el fuego, la luz, las sombras, la tierra, las plantas, el agua y cuando sientas uno intenta concentrar tu mente en él y volverlo parte de ti. Si logras controlar aunque sea un poco uno, significará que tienes aptitudes con ese elemento…o ese es la teoría según lo que he preguntado a los maestros-

A decir verdad desde siempre he sentido una fuerte conexión con el viento, fuego, luz y sombras, pero no importa cuánto entrene o me concentré no logro hacer más que hacer temblar por un instante esos elementos. Hasta he logrado que mi imagen parpadeé intentando tele transportarme, pero por alguna razón no me muevo más de un milímetro y siempre que intento eso o usar elementos termino con un dolor por todo el cuerpo, como si hubiera algo dentro estuviera reteniendo mis poderes..

Escuchó su explicación sobre que golpearlo estaría mal

La violencia innecesaria está castigada dijo como reflejo, ella misma se sorprendió pero no lo externo... o no mucho, sonrió mirando sus piernas alegre de compartir una de sus habilidades con Maximillian.

Le miró con cierta incredulidad mientras se inclinaba un poco para saltar, su salto no fue mayor al de una persona normal, pero sus alas lastimadas se movieron dándole apenas un centímetro mas antes de que ella soltara un suave gemido de dolor

Cuando comenzó a correr ella trató de seguirlo aunque sentía que sus piernas eran un poco torpes, quizás porque desde que estaba ahí no las había usado para ese tipo de actividad, aunque no fuera mucha la distancia pero Annie se quedaba atrás apenas por unos centímetros, en el regreso ella se queda mirandole ir por unas ramitas con una mano en su corazón sintiendole ir más rápido, era la primera vez que lo sentía tan acelerado, se inclinó un poco, era una sensación "curiosa".

Le mira encender una fogata, el fuego le dejó medio hipnotizada, creía que no había visto algo tan lindo como las llamas que salían y bailaban al ritmo del aire... sonrió pensando en lo perfecto que era la creación de Dios, pero Max sentandose le distrae, ella se acerca y se sienta a su lado imitando su pose, le escucha y aciente, pero no tuvo que esforzarse en buscar un elemento...

Su atención estaba 100% enfocada en el fuego, el calor que provocaba en su piel, el bailar de las llamas, los colores, los olores, las chispas que brincaban de las ramas que se quemaban, sus rasgos quedarón sin emociones... su concentración era absoluta, las chispas que ella veían emitian una suave luz blanca cuando estallaban, de repente esas chispas comenzaron a hacerse mayores, iluminar mas....

Ella dejó de ver las chispas y miró las llamas, de ellas salió una llamarada, de la cual pareciese que se dibujaba un angel femenino volando hacia arriba, pero la imagen desapareció demasiado rápido....

Alcé una ceja ante el comentario de Annelise. Casi parecía programado. En fin.

Vi con cierta tristeza que no pudiera saltar alto y se le dolieran las alas. Pero bueno, no es de extrañar.

Le hablé a Annelise, pero no parecía hacerme mucho caso, estaba más concentrada en el fuego...y lo que pasó me dejó sin habla.

Las chispas empezaron a brillar más y más. ¿Significa que es atributo luz? Perfecto para un ángel, pero la cosa no quedo así, justo cuando me dispuse a hablar del fuego salio una figura en forma de ángel femenino hecho de fuego y mis labios se silenciaron.

-...Está bien. Me has impresionado. Creo que es suficiente por hoy.- Dije tras medio minuto de haber acabado todo.

Me quito un guante y me jalo la manga de ese brazo para que quede pegado a mi hombro antes de con esa mano alejar las ramas unas de otras pero sin alejarse mucho antes de pararme y con el pie apagar cada una rodándola por el suelo. Dada mi resistencia no me daño o quemo fácilmente.

- Parece que aparte de súper-velocidad, tienes afinidad con la luz y el fuego. Interesantes poderes.Me pregunto que hazañas podrías hacer con todo eso.-Podríamos buscar más habilidades pero dudo que aparezcan más. Si las hay podemos dejar que aparezca con el tiempo. - Le digo con una sonrisa.

- Esto es todo por hoy. Puedes ir a descansar sí lo deseas o puedes ir conmigo al salón a ver alguna película. Depende de como te sientas- Entonces hago una pausa acordándome de algo,

Tengo un doctor que me ha estado estudiando desde que llegué. Es algo molesto, si de él dependiera yo siempre estaría haciéndome pruebas, pero es al unico al que puedo recurrir cuando me hiero. Lo malo será el precio de traerlo...quizás seria mejor invitar a Annelise y llevarla cuando yo tenga que ir allá.

-...Ahora que recuerdo. Tengo un doctor desde hace mucho tiempo, es bastante posible que él tenga una idea para ayudarte. Si lo deseas podemos ir un día de estos a Londres, mi ciudad, para verlo y de paso sirve que te enseño la ciudad y muchas cosas interesantes, como una cita. ¿qué dices?-

Su voz le desconcertó, se sintió tan confundida como la primera vez que había llegado ahí, como si todo fuera ajeno, parpadeó un par de veces mientras él le indicaba que eso era todo por aquel día, le miró como si no le reconociera, pronto la "cordura" cayó en ella y le sonrió mientras abrazaba sus piernas mirandole apagar el fuego.

¿Afinidad al fuego y la luz? Repitió mirando con cierta emoción las ultimas chispitas que se extinguian saltando entre el pasto. Sus ojos mostraban cansancio, ni ella se había dado cuenta de cuan cansada estaba hasta ese momento en que bostezó y cubrió su boca con elegancia, escuchó su invitación y se emociono levantandose casi de inmediato

¡Amo las películas! ¡Son tan románticas! Una de las primeras cosas que le habían enseñado a Annelise eran las películas del genero romántico, ahora ella creía que todas las películas eran así de "tiernas" No estoy cansada, vamos a ver plículas, por favor Maximillian Von Alexandros pero Max comenzó a hablar de un médico, de londres, y de citas

¿Como las citas de las películas? Preguntó con una suave y tierna sonrisa mientras le tomaba del brazo para jalarlo hacía adentro Me gustaría mucho